El pasado 16 de octubre los alumnos del Taller de teatro recibieron una presea de lágrimas en el marco de las actividades del Festival Internacional de Teatro Universitario. Sí, una medalla hecha de un racimo de lágrimas que los jueces derramaron durante la presentación de Mujeres de arena, obra que retrata de manera cruda el tema de los feminicidios en Ciudad Juárez y que hoy se replica en el Estado de México. Ante este panorama, nuestros alumnos se indignan, levantan la voz y hacen teatro. Hacen algo al respecto, hacen arte.
Con una escenografía frugal y directa, sin artificios, la puesta en escena que el Taller de Teatro del CECA Hidalgo presenta conmueve al espectador, lo sacude. Detrás de este artefacto dramático está el trabajo disciplinado de cada uno de sus componentes. Los alumnos que vieron más allá del Expresarte que organiza la UNAM y decidieron hacerle frente a un certamen internacional con valentía y trabajo diario.
El Festival aún continúa y estamos a la espera de los resultados sobre la continuidad de nuestra participación en la segunda fase del festival, sin embargo, nadie nos quita del corazón laureado nuestra insólita medalla de lágrimas.
